El Día de todos los Santos es una de las fiestas más importantes que se celebra en Guatemala. Sus inicios vienen de Europa y otras partes de Mesoamérica. En Guatemala la tradición incluye la visita a los cementerios el 1 de noviembre para enflorar a los muertos, el vuelo de barriletes gigantes de colores, pintura de los nichos, elaboración de platillos especiales como fiambre y conservas de calabaza entre otros postres.
En Santiago y Sumpángo Sacatepéquez el vuelo de barriletes gigantes es uno de los espectáculos más admirados que atrae la visita de miles de personas nacionales y extranjeras, la mayoría son piezas trabajadas por comunidades locales a lo largo del año.
En la ciudad de Guatemala muchas personas van a los cementerios a enflorar a sus muertos y llevan fiambre y ayote para comer en familia junto a la tumba de sus seres queridos. En las comunidades indígenas las personas llevan cocido de ayote, güisquil, peruleros y elotes como una ofrenda y la colocan en la cabeza del difunto por lo que se le conoce como cabecera y comparten la vianda en familia.